Cada vez que voy a China observo como lo digital empieza a impregnar una buena parte de la vida del país. La primera vez que puse el pie en China fue hace ya casi una década, y por aquellos tiempos casi todo el mundo me preguntaba si tenía cuenta QQ, hoy en día me piden mi WeChat para agregarme en su red de contactos. Es curioso que en ambos casos, y a pesar de que ha pasado una década, la compañía que ofrece ambos servicios sea la misma, el gigante tecnológico Tencent.
China, con su enorme población es obviamente el país con mayor número de internautas y lo hacen navegando en un universo que (casi siempre) es muy distinto al que tenemos en Occidente. Allí Google es Baidu, Twitter es Weibo, Uber es Didi y Facebook está integrado en el galimatias potente que es WeChat.
También en el pago uno se siente como de otro planeta, salvo los hoteles y algunos restaurantes seleccionados, Visa y Mastercard no son aceptadas en muchos establecimientos como supermercados o restaurantes, allí lo que funciona son las tarjetas Union Pay, además de los masivos pagos móviles que se realizan con AliPay y WeChatPay. Lo dicho, otro mundo digital que uno se encuentra a las primeras de cambio que pone el pie en China.
Hace unos días terminé de leer el interesante resumen ejecutivo del report Digital China: Powering the economy to global competitiveness que ha elaborado McKinsey. Es un trabajo muy completo y desde luego que ayuda a entender y visualizar muchas cosas, sobre el impacto digital que se está produciendo en China, pero también sobre las repercusiones que puede llegar a tener a escala global. No nos olvidemos que China es el país más poblado del mundo, siendo ya la segunda economía del planeta.
Se identifican tres fuerzas (disintermediation, disaggregation, dematerialization) que son disruptoras en cuatro sectores de actividad:1) el retail 2) la automoción y la movilidad 3) la salud 4) el transporte y la logística.
A continuación dejo unos breves notas sobre ciertas realidades e impactos que están relacionadas con áreas digitales de China:
- E-commerce: Hoy en día, China ya representa el 40% del comercio online del mundo. China tiene una cantidad de transacciones económidas que ya son superiores al conjunto de lo que tienen Estados Unidos, Alemania, Japón y Reino Unido.
- Pagos móviles: En el año 2016, los pagos con teléfono móvil fueron de 790 billones de dólares, once veces más que en Estados Unidos.
- Nuevas tecnologías: China está en el top 3 mundial de países en cuanto a inversiones de capital riesgo en tecnologías digitales como realidad virtual, vehículos autónomos, impresión 3-D, robots, drones e Inteligencia Artificial.
- Plataformas BAT vs Plataformas GAFA: Si en Occidente llamamos GAFA al acrónimo las cuatro grandes empresas (y plataformas) tecnológicas Google, Apple, Facebook y Amazon, en China tienen sus líderes en Baidu, Alibaba y Tencent. Dichas empresas tienen un diverso y rico ecosistema digital que muchas veces es transversal y que llega a numersos sectores y actividades.
- El Retail: Hay tres tendencias que están influenciando sobremanera en la transformación del sector: 1) el omnicanal, es decir la mezcla entre online y offline 2) Los datos que en su mayoría provienen de las grandes plataformas digitales 3) bienes y servicios que cada vez se tienen menos en propiedad, ya que se comparten o alquilan por uso y servicio.
- La automoción y la movilidad: China es ya el mayor mercado del automóvil del mundo. Como en otros lugares, la tendencia va a un sistema de pagar por servicio y uso, lo que va a provocar tener menos coches en propiedad.
- La salud: Las soluciones digitales pueden construir un sistema enfocado en el paciente. Tecnologías que tendrán un gran impacto van a ser el Big Data, la Inteligencia Artificial y el Internet de las cosas.
- El transporte y la logística: Se señala la posibilidad de que la impresión 3-D puede ser una gran transformación que afecte de lleno al transporte, al poder imprimirse muchas cosas en destino final, eliminando con ello los transportes de larga distancia.
- El empleo: Habrá una gran destrucción de empleo con la digitalización y la automatización, pero también se van a crear muchos. Al hablar de cifras es complicado calcular si la diferencia será mayor para los que se creen o para los que se destruyan. Se barajan varias cifras (destruidos entre 161 a 281 millones, creados entre 176 a 253 millones). Lo que parece claro, es que al igual que en otras partes del mundo, se va a necesitar una gran estrategia política y laboral que incida en una completa reforma educativa, el desarrollo de habilidades técnicas y la creación de programas de empleo focalizados en las nuevas tecnologías.
- El Management: La mayor parte de las empresas chinas son jerárquicas, mucho más que las de Occidente, lo que provoca que las empresas en China no sean demasiado flexibles. La digitilzación va a provocar que se necesiten crear oganizaciones mucho más ágiles y dinámicas.
- El papel de Gobierno: China tiene una compleja estructura política con un Partido Comunista que ejerce un control muy importante sobre aspectos básicos del mundo digital, como por ejemplo son: la ciberseguridad, los standards digitales, la soberanía digital, la censura y la estrategia del país. En el report no se dice nada sobre las posibles repercusiones políticas o sociales que pueda llegar a tener internet.
Durante los próximos años sin duda que vamos a ir viendo como China y Occidente encaran los innumerables cambios y retos que el mundo digital va a provocar.
Pues parecería que ese último elemento es fundamental. ¿No habla nada de democracia (al estilo occidental)? Porque lo del control… ejem, parece que tiene su miga.
@Julen: Me parece que ese tema no va a cambiar demasiado. El firewall que tienen y la censura ha hecho también que para muchos occidentales sea un dolor de cabeza trabajar y vivir en China. La red allí tiene sus cosas, y el gobierno ejerce un severo control. Es curioso como en la antigua colonia británica de Hong Kong está todo abierto, y difiere de la otra China en lo que la gente puede leer y ver. El mundo Julen, en toda su diversidad y complejidad :).