En los últimos tiempos estamos experimentando una serie de rápidos cambios que afectan de lleno a nuestras vidas, tanto desde el punto de vista personal como profesional . La globalización ya impregna de lleno la vida social, económica y empresarial de nuestras realidades , dependiendo ello ya cada vez menos del donde estemos. Por otro lado, la irrupción de los países llamados BRIC ( Brasil, Rusia, India y China) está cambiando muchos tópicos hasta hace poco aceptados por muchos. A todos nos suenan aquellos comentarios que decían muchos : son pobres, solamente producen baratijas, nosotros innovamos mientras ellos solamente fabrican . En la mayor parte de los casos esas visiones ( equivocadas a mi juicio) fueron perspectivas apreciadas desde el prisma de quienes no han estado allí y hablan sin conocer, en muchos casos desde un despacho opaco a la realidad del mundo actual.
Esa actitud chocaba con la de la gente que estaba en esos países o viajaba por ellos, estos si fueron conscientes del cambio global que iba a acontecer. Hoy en día parece obvio la importancia de los países BRIC , tanto por su poder económico como por las perspectivas de futuro. Actualmente esos países tienen cada vez una mayor importancia en estos convulsos tiempos en los que Estados Unidos y Europa sufre en sus carnes una crísis económica de magnitudes descomunales.
El otro factor no menos determinante es Internet, la irrupción en la última década de la red ha redefinido infindad de modelos de negocio y ha permitido una revolución por medio de la Web Social con el uso de blogs, vídeos, podcasts , fotografías, wikis. Todo ello hace que tengamos una dependencia cada menor del espacio físico tradicional, y es que con una conexión a Internet podemos estar conectados con el mundo a paso de un click . Herramientas todas ellas que han permitido un protagonismo tremendo al individuo como creador de contenidos y que han ayudado a redefinir muchas formas de trabajar . El compartir , la co-creación y las redes que nos permite Internet cada vez se vuelven más sociales y nos hace en muchos casos ( como escribiré en el próximo post) el identificar/encontrar a personas afines y a las tribus ( como dice Seth Godin) con las que nos sentimos identificados y con las que podemos realizar proyectos.
Con todo esto , parece evidente que se presentan infinitos cambios, afectando de lleno a la forma de encarar el empleo, la carrera profesional y la forma de comunicarnos con el mundo. Antiguamente era normal eso de trabajar en una misma empresa por toda la vida, los cambios eran mínimos y la estabilidad personal hacía que la vida profesional fuera algo líneal y sometido a muy pocas alteraciones. Nacer, crecer y trabajar en un entorno local era asumido por la gran mayoría como el lógico camino de una vida profesional y personal con pocos cambios. Pero hoy en día con todos lo que estamos viendo parece poco probable que esa realidad pueda ser mantenida en el tiempo, sobre todo cuando hablamos de una era global y digital. La movilidad y el dinamismo parece que va a ir cada vez más ligado a la carrera profesional que espera en las próximas décadas del siglo XXI.
El siglo XXI ha cambiado de lleno las realidades que teníamos inculcadas cuando ibamos al colegio y la Universidad ( yo nací en 1978 por lo que a mis 33 años me encuentro a medio camino entre los nativos y los inmigrantes digitales). Fenomenos comentados anteriormente como la globalización, los países emergentes, Internet o la maleabilidad de los perfiles profesionales son sintomas de primera maginitud que nos dicen que las cosas han cambiado.
Llevo desde hace tiempo pensando y trabajando alrededor del viaje como forma de aprender/emprender. Por mis experiencias personales/profesionales internacionales considero al mundo como el mejor laboratorio de ideas y departamento de I+D. Tras vivir en diferentes países veo e intuyo que las cosas no tienen nada que ver con las que había hace tan sólo una década. Uno de los grandes problemas de España ha sido siempre la poca movilidad laboral de trabajadores, la tónica común era ( y sigue siendo) que el ir a trabajar a otras provincias o países era un calvario para muchos. A eso se acoplaba el estar atados a lo aceptado por muchos como una necesidad : la compra de vivienda. Todo eso ha ido alterándose en los pasados años con la constante crísis económica y con los nuevos paradigmas alrededor de fenomenos como la globalización o la propia Internet. Hoy en día parece una realidad que muchos profesionales deben tener el mundo por montera y en ello NO hay que ver un problema sino las muchas oportunidades que pueden generarse al tener esas experiencias internacionales.
Parece obvio que la dimensión que viene en estos nuevos años va a fomentar en muchos casos el trabajar por proyectos, la movilidad ( tanto física como virtual) , y los entornos internacionales que nos permitan co-crear y trabajar con personas de cualquier parte del mundo. Tengo bien claro la irrupción de la figura de un nuevo profesional llamado «Knowmada» que acople una visión global con la mirada local , móvil, dinámico, que se mueva como pez en el agua en entornos internacionales y que tenga el apoyo de todo ello en Internet y en el mundo a su oficina y campo de actuación. Parece que todo ello puede ser uno de los pilares de nuestro futuro personal y profesional. Estamos ante la irrupción de una nueva era donde empieza a coger fuerza una forma diferente de hacer , de relacionarse y en definitiva de ver muchas cosas. Bienvenidos al futuro….
Gracias Juan, un abrazo y hasta pronto amigo 😉
Una visión muy lúcida de la realidad de nuestro tiempo. Gran artículo y fotos Iván.